No queremos hijos perfectos, pero sí felices
Los padres somos los responsables de educar a nuestros hijos y velar por su salud emocional, que es tan importante como cualquier otra. De ahí la importancia de cultivar la autoestima en los niños.
Los padres somos los responsables de educar a nuestros hijos y velar por su salud emocional, que es tan importante como cualquier otra. De ahí la importancia de cultivar la autoestima en los niños.
Los padres queremos darle lo mejor a nuestros hijos, y nos planteamos si lo mejor para él será buscarle unas clases de apoyo para reforzar esas asignaturas en las que hemos visto que flojea. Pero por otro lado sigue ahí la duda que sembró lo que nos dijo el tutor, ¿y si nos estamos equivocando y no es eso lo que necesita?
Seguro que más de una vez hemos pronunciado esa frase de “no puedo con su mal humor” o nos hemos preguntado a qué vienen todas esas malas contestaciones de nuestro hijo o hija. ¿Por qué esa rebeldía hacia nosotros sus padres? ¿Acaso le hablamos nosotros así? Si estas preguntas rondan por tu cabeza más a menudo de lo que te gustaría quizás sea el momento de dejar de preguntártelo a ti mismo y buscar respuestas.
Se habla mucho de hiperpaternidad, y de padres helicópteros últimamente ¿cómo son esos padres? ¿me estaré convirtiendo en uno de ellos?
Siempre que hablamos de poner límites o normas a los niños salen a la luz muchas de las preocupaciones e inseguridades más frecuentes en los padres. Y es que estamos muy empeñados en la obediencia, en que nuestros hijos tienen que ser buenos, portarse bien, obedecer a sus padres, cumplir las reglas, etc.
Tras en revuelo en las redes a cerca del texto del libro de Lengua y Literatura de Santillana de 1º de ESO «Qués es un marrón y cómo afrontarlo», nos planteamos qué repercusión puede tener en los niños esta ironía.